La sala blanca
La Cova Lachambre, descubierta en 1981, es la cavidad con
más desarrollo de todas las que encontramos bajo la montaña de Embullà, en
Villefranche de Conflent. Es un sistema subterráneo complejo, con casi 27 km de
galerías de recorrido horizontal muy adornadas con formaciones y con abundancia
de cristalizaciones de aragonito. 27 km de progresión más bien compleja, con pocas
galerías amplias y cómodas.
El balcón del Canigó
Inicio de la galería del Martell
Al principio la progresión es cómoda
Las dimensiones se reducen rápidamente y empiezan a aparecer las formaciones
El objetivo fundamental de la visita es la revisión
topogáfica de la galería del Martell, uno de los ejes principales de la cavidad,
para ver sus posibilidades de coincidencia con la cercana Cova de les Puces,
después de que se haya logrado la conexión de la Cova de l’Estació Vella con la
parte final de la galería del Canigó.
Dentro de la pequeña gota que cuelga de la punta del macarrón se puede observar el reflejo de los macarrones vecinos
Aparecen también algunas pisolitas o perlas de las cavernas
Aprovecho el trabajo pausado y metódico de mis compañeros
para hacer algunas fotografías de la primera parte de la citada galería. Invertimos
bastante tiempo en la tarea, no hay grandes espacios y las dimensiones son por
lo general pequeñas, por lo que, por un lado, nos tenemos que mover con mucho
cuidado, y por otro, hay que ir controlando los reflejos de los flashes sobre
el blanco aragonito para no sobreexponer en exceso. Seguiré con las fotos, aún tengo que procesar unas cuantas.
