miércoles, 30 de agosto de 2023

Pic du Milieu - Pic de Tapou

El macizo del Vignemale es, más o menos, una larga cresta de picos con forma de semicírculo alargado y abierta hacia el Este, alrededor del glaciar de Ossoue. El Petit Vignemale más al Norte y el Tapou más al Sur serían los extremos. Este perfil característico ha facilitado que el hielo del glaciar se conserve algo mejor que en los otros de la cordillera, algo mejor solo, teniendo en cuenta que no es cara norte.

El Vignemale es un interesante muestrario geológico que para mi tiene dos ventajas; la primera, las posibilidades de fotografía; la segunda, que cualquier montaña no granítica es más amable con mis rodillas; los descensos por las zonas de granito son, casi siempre, letales para las articulaciones, y las mías llevan ya mucha fatiga acumulada, mucho desgaste. 






Rodeamos el espolón del Pic du Milieu para alcanzar la pedrera final

Subimos desde el barrage d'Ossoue, desnivel potente que no da tregua. Cruzamos el río y nos dirigimos hacia la cabaña de Lourdes, antes de llegar a ella dejamos el sendero principal y cogemos otro a la derecha que empieza a subir fuerte hacia los Lacs de Montferrat. Pasamos los lagos y seguimos en subida constante hacia el cuello que separa los picos. A la izquierda, el Milieu; a la derecha el Tapou.

Desde aquí podemos observa ya el refugio Baysellance, el Petit Vignemale y las cuevas de Russell

Ya queda poco...


Entre el Montferrat y el Tapou, la punta superior y la inferior

A lo lejos, la marmolera de los Infiernos, a la derecha, la del Montferrat


Algunas cimas del Vignemale con el Montferrat en primer plano

El barrage d'Ossoue a vista de pájaro 

Una mirada a las cumbres de Ordesa

Descenso hacia las puntas inferior y superior de Tapou




sábado, 26 de agosto de 2023

Circular Gabietos - Taillón

 

Desde el Col des Tentes nos dirigimos a la Forqueta de Gabietos pasando por el Puerto de Bujaruelo. De la Forqueta descendemos un poco hacia el barranco de Gabietos, que tendremos que remontar hacia la izquierda dejando a la derecha el itinerario que nos llevaría a la Faja de la Escuzana, la cual podemos observar en frente nuestro. 

El Taillón con las primeras luces del día

Bajamos de la Forqueta de Gabietos

El barranco es un enorme canchal de piedras que gana inclinación con rapidez en el fondo del circo. Seguimos los hitos y alguna traza de camino y así evitamos meternos de lleno en las pedreras más complejas. En la parte final es más sencillo dirigirse hacia las rocas de la izquierda y trepar directamente que intentar subir por las piedras sueltas de la tartera de caliza, donde naufragaríamos seguro por la inclinación de la pedrera. En principio no tiene más problema, aunque he visto reseñas que dicen que es complejo subir por aquí. Quizás nuestro hábito de navegar a través de los grandes canchales de caliza como aficionados a la espeleo nos haya influido en la valoración.

Remontamos el barranco de Gabietos donde encontraremos algunas piedras sueltas...


Curioso canchal tricolor, la pedrera de caliza es más compleja de transitar

En la cabecera del barranco mejor subir por las paredes que por el canchal

Alcanzamos el collado existente entre el Pico Escuzana y los Gabietos y nos asomamos ya a la zona de Salarons. A partir de aquí empieza la cresta. Hay un itinerario de hitos de piedra que nos irán guiando, los necesarios. No hay dificultades específicas de escalada ni hemos usado otro material que el casco, el casco siempre; se progresa bien sin complicaciones, pero tampoco es para turistas, hay que estar habituado al vacío y a trepar. Es necesario ir con cuidado y buscando los pasos, como siempre; la cresta es aérea y en ocasiones el 'patio' es impresionante, sobre todo hacia la parte norte, más o menos. A tener en cuenta que estas valoraciones siempre son personales, la graduación de la dificultad en la montaña siempre es relativa; los que no estén habituados a estos terrenos pueden tener una gran sensación de inseguridad, y complicarse la vida aquí tampoco es difícil. Simplemente hay que ir con cuidado y asegurando los movimientos.

Aquí nos encontramos con el sol e iniciamos la cresta



Este paso no es difícil pero estamos justo encima de un paredón de cientos de metros



Una vez llegamos al Gabieto Occidental, el itinerario es más sencillo y ya casi podremos ir andando usando las manos en contadas ocasiones. Seguimos al Gabieto Oriental, bajamos al cuello y remontamos hacia el Taillón. Hasta ahora no nos hemos cruzado con nadie, a partir del Taillón nos encontramos ya las multitudes que suben desde Serradets y la Brecha, la primera vez que veo la Brecha en agosto sin nada de hielo por el lado francés; unos con zapatillas de paseo urbano, alguno con botas rígidas, otros vestidos de runner... y nosotros aún con el casco en el coco. En la cima casi no quedan piedras libres donde sentarse. Hasta aquí no hemos visto a nadie, a partir de aquí imposible estar solos... así que guardo la cámara en la mochila y nos vamos, esta parte ya la tengo más que fotografiada, y con tanta gente no motiva mucho.



Espectacular imagen del Gabieto Occidental desde el oriental. Al fondo, el Mondarruego.

Vista hacia abajo, el Col des Tentes y el Puerto de Bujaruelo




La cresta que hemos recorrido

Llegamos al Taillón


El Vignemale en la lejanía

Bajamos hacia la Brecha para volver al coche por Serradets, sin pisar nada de nieve. Los heleros que hasta hace poco quedaban ya han desaparecido. El sendero es una lenta fila de personas que intentamos adelantar como podemos...  

El GPS me ha marcado 16,7 km y 1235 m de desnivel acumulado, algo más de 6 horas en movimiento y casi 3 contemplando el paisaje en un día espléndido... nos lo hemos tomado con calma.

jueves, 3 de agosto de 2023

Maristás


 
La cresta de Maristás es un sinclinal calcáreo que se ubica justo en frente del valle de Pineta y es un gran mirador sobre el mismo, lástima que el día, en plena canícula, no acompañara demasiado, hay calima y alguna nube que da vueltas a nuestro alrededor. En primavera, con alguna entrada de aire frío que limpie la atmósfera y algo de nieve en las cumbres el panorama ha de ser de primer orden. Hacia el norte, las paredes abruptas se levantan sobre el valle de Bielsa; hacia el sur, las laderas se dirigen hacia el valle de Chistau. 

Desde el collado de la Cruz de Guardia el itinerario no creo que sea muy visitado, hay un sendero desdibujado y, en bastantes ocasiones, obstaculizado por las ramas de los árboles. Desde otro lugar, menos aún.








Hay que protegerse del sol...