Cova d'en Marigot o de l'Aumidiella Petita

Sigo con la serie de Les Aumidielles, en progresión ascendente en lo relacionado con el interés estético. Conocida originariamente como Cova de l'Aumidiella Petita y rebautizada después como Cova d'en Marigot, tiene más desarrollo que la Cova del Dos y que l’Aumidiella Gran. 546 m de recorrido y 22,4 de desnivel, pero su espacio vital en general es más ajustado. Una sucesión de salas y galerías de techo bajo y diversos pasos estrechos que van a suponer una buena terapia para nuestras rodillas y nuestras lumbares. La primera estrechez que encontramos, cerca de la entrada, es la más contundente; superada ésta, las siguientes son algo más cómodas.

La boca de entrada, cerrada con reja

Una boca casi circular, visible con facilidad, da paso a una pequeña sala con el suelo lleno de sedimentos compactados. Al final de la sala un paso estrecho de desobstrucción nos permite llegar a otra sala de techo bajo. Otro paso estrecho y otra sala, donde empieza a aparecer la concreción. Después, dos posibilidades de continuación, primero, una estrecha gatera que nos lleva a unas galerías superpuestas. Por otro lado, una galería casi vertical que baja unos metros hacia el piso inferior. Está equipada con una cuerda llena de arcilla que casi no sirve para nada, más peligrosa que otra cosa por lo que resbala. Otra sala muy adornada y en la que podemos ponernos de pie, otra galería estrecha y la sala final, también llena de formación y de arcilla.

La cavidad es pequeña pero laboriosa, hacer su recorrido completo requiere su tiempo. Está muy adornada con diversidad de formaciones, pero las dimensiones poco cómodas para moverse y la abundancia de arcilla no facilitan la fotografía. por esto, me dedico más a hacer fotos de detalles que de los espacios, de las salas. No son grandes, son muy irregulares y no son nada sencillos de iluminar. 

Las formaciones excéntricas aparecen por todos los rincones