Montserrat es un macizo de conglomerado con un carácter peculiar. Tiene una potencia que se acerca a los mil metros y presenta un relieve muy agreste con una gran concentración de agujas, gendarmes y canales, es un gran lapiaz de roca conglomerada.
Aparte de ser un importante centro de escalada, permite algunos recorridos senderistas bastante interesantes y con diversos niveles de dificultad.
Perspectiva de la zona de Gorros
Alrededor del Monasterio, ubicado en uno de los extremos de la montaña, podemos encontrar los restos de diversas ermitas usadas en su tiempo para usos religiosos. Fueron destruidas por el ejército de Napoleón, siendo algunas reconstruidas posteriormente. Ahora sirven más de refugio a los escaladores por su interesante ubicación.
Ermita de Sant Benet, habilitada como refugio
Realizamos un recorrido circular visitando diez del total. Nos dejamos algunas por diversos motivos, una porque tiene el acceso cerrado al ser usada por los monjes, otra para evitar las aglomeraciones de turistas, y otra más porque queda escondida y algo alejada del recorrido. En total, contabilizo trece las que yo conozco.
Iniciamos el recorrido desde el Monasterio subiendo hacia Sant Benet por las escaleras. Pasamos primero por las ruinas de la ermita de Santa Anna. Luego llegamos a Sant Benet. Desde aquí, nos acercamos a la ermita de la Trinitat para alcanzar luego la de Sant Salvador. Seguimos por el Serrat de Les Lluernes hacia el Cavall Bernat, piedra característica de la montaña coronada por una imagen de la Virgen.
Perspectiva desde la ermita de la Santíssima Trinitat
Ermita de Sant Salvador
Anclajes de escalada con mucha experiencia ya
El Cavall Bernat
El Cavall desde más cerca
Mirador de la ermita de Sant Antoni
La cima del Cavall con la imagen de la virgen de Montserrat
Por detrás de la ermita subimos a la pared inmediata. No tiene complicación pero el itinerario es absolutamente aéreo. Atamos por precaución al chucho, aunque está hecho un escalador de nivel.
El patio que tenemos es impresionante
Desde aquí las vistas son espectaculares
Subimos por la canal del Gorro Frigi
Llegados al cuello, bajamos por el otro lado hacia la ermita de Sant Martí, quizás la de acceso más complejo. Después, siguiendo un itinerario más intuitivo que otra cosa, bordeamos la Madalena Superior y nos dirigimos a la canal que sube hasta la Miranda de les Madalenes. No tiene ninguna dificultad aunque desde arriba parece otra cosa. En la Miranda nos reencontramos con los grupos de turistas diversos, que ya nos acompañarán hasta el Monasterio.
Ermita de Sant Martí, ubicada debajo del Gorro
Desde la ermita, subimos por la canal hasta la miranda de la Magdalena. El itinerario es poco evidente.
Desde la Miranda de la Magdalena tenemos una buena perspectiva del Gorro. En la imagen, dos escaladores bajando del mismo
Bajamos de la Madalena hacia St Onofre
Al fondo, St Joan
Acceso a la ermita de Sant Jaume. La cuerda resulta útil para bajar.
La ermita de Sant Jaume, en la base de la Gorra Marinera, tiene buenas vistas sobre el Monasterio
Hay que vigilar en el descenso
Hola, las cuerdas estan fijas en la montaña o las llevavas tu?
ResponderEliminarHay track gps en wikiloc?
Salut!
Están fijas. La del Gorro en alguna ocasión ha faltado, pero suele estar. Es necesaria si la roca está húmeda. A la ermita de Sant Jaume he subido dos veces, la primera no había cuerda, la segunda si. Sin cuerda tampoco hay problema, ayuda a bajar más que nada.
ResponderEliminarEn wikiloc hay varios tracks, unos más completos, otros con menos ermitas. El sendero está bien, solo es menos claro en la zona del Gorro, bajo mi punto de vista.